MasNutricion Logo
Published on

El "permitido" de la semana, si o no?

Authors

El “permitido”, “cheatmeal” o“comida trampa” es lo que llamamos a ese momento o dia en el cual está permitido comer alimentos o preparaciones que no están incluidos en la dieta, por lo general lo que se incluyen suelen ser alimentos con un alto contenido calórico.

Hoy en día, son muchos, principalmente del mundo fitness, los que recomiendan hacer un “Cheat Meal” o “Comida Trampa”, 1 o 2 veces a la semana. Lo aconsejan porque así te puedes dar la libertad de disfrutar si llevas una dieta para perder peso. Todo esto suena muy bien, pero es saludable???

Si llevas un plan nutricional donde lo único en lo que piensas es en llegar al permitido de la semana, entonces algo está fallando en tu dieta. Quiere decir que tu plan actual es tan restrictivo, que te genera ansiedad por la comida, y que principalmente, no te permite disfrutar de ciertos alimentos en un día común y corriente. Si te está pasando esto, lo ideal es que no hagas el permitido, si no que entre semana, o simplemente, cuando a te den ganas, y tu cuerpo te lo pida, te des un gusto, porque de lo contrario por privarte terminarás teniendo atracones.

Con esto, no quiero decir que todos los días comas postres, alfajores, o eso que tanto te gusta y que no está incluido dentro de tu plan de alimentación. Me refiero a que sigas un plan alimentario, pero acorde a tus metas, y que se adapte a tus gustos, y estilo de vida. El hecho de que te comas 1 cuadrito de chocolate un día en particular, no va a hacer que engordes, pero si te va a ayudar a calmar la ansiedad por lo dulce, te va a mantener satisfecho, y no vas a estar deseando que llegue el día del permitido. Por ejemplo, si un miércoles quedas con un amigo para almorzar o cenar, no es necesario que canceles tu salida por el hecho de que no puedes comer nada más que no esté incluido en tu plan de alimentación ese día.

Hay evidencia científica que demuestra que si se consume un comida rica en exceso, por un período de tiempo corto, lo que genera es más deseo y descontrol por ese producto, y es eso esto justamente lo que queremos evitar.

¿Cómo empezar?

Siempre que decidas comenzar una dieta hay que tener cuidado con toda la información que circula por las redes sociales.

Primero, consulta con un nutricionista que te ayude a llevar un plan no restrictivo. No busques la magia y lo pintoresco, las dietas de moda por lo general están mal diseñadas y muchas veces afectan a la salud. Coméntale tus preferencias alimentarias, y lo que no te gusta, para que en conjunto, puedan llegar a un plan con opciones saludables, que te ayuden con los antojos durante la rutina. Otro consejo importante, es que no te auto-sabotees. Si tienes alimentos a simple vista que te “llaman” para que los comas, escóndelos, o guárdalos, donde no los puedas ver, o directamente no compres de más, así evitas tentarte solo con saber que los tienes.

Si en algún momento tienes mucha ansiedad, o apetito, prueba tomando agua. Si esto no te da resultado, entonces pensá en lo que realmente te apetece, y en vez de eliminar pensamientos por algún postre, dulce, o comida chatarra, sírvete algo mejor. No te obligues, utiliza la autocompasión y dale a tu cuerpo una opción más saludable y busca distraerte. Si haciendo esto todavía sentís ganas de algo más, date un gusto, y pasa la página. Si esto ocurre constantemente, es preferible que consultes con un profesional. De cualquier forma, debes evaluar si existe alguna situación que te esté produciendo ansiedad, o cualquier otra emoción que puedas estar cubriendo con los alimentos.

También es necesario que entiendas que por un chocolate, dulce o alimento poco sano que consumas en un día, si tu alimentación habitual es saludable, no afectará tu progreso.

En fin, puedes incluir muchos alimentos saludables para calmar tu ansiedad, como el chocolate amargo, yogurt con fruta, 1 panqueque con mermelada sin azúcar, algún postre lácteo preparado con edulcorante y leche descremada, una infusión o té. Lo importante es que realmente escuches lo que tu cuerpo te pide, y le hagas caso. Algunos días te pedirá pizza, otros te pedirá una ensalada verde, todo está en cómo lo lleves.